

La ciudad de las nubes verdes.

CELEBRACIONES
Semana Santa
En Ipiales se celebra la Semana Santa, con procesiones sacras, vivencias espirituales y familiares. Además, existe la costumbre centenaria de compartir “los doce platos y las tres ollas” con su variada gastronomía nativa. Es notable la multitudinaria peregrinación al Santuario de las Lajas, destino religioso y cultural. La Semana Mayor se inicia el Domingo de Ramos; el Martes Santo, con la procesión de las siete caídas; el Jueves Santo, con el lavatorio de los pies y la visita a los monumentos, y los conciertos de música religiosa en todos los templos de la ciudad, que congregan muchas gentes; el Viernes Santo, con el vía crucis, la adoración a la Santa Cruz y la solemne procesión de más de 40 pasos, con imágenes sagradas que las portan las Asociaciones Religiosas de la Catedral, por las calles céntricas de la ciudad, en un recorrido de cuatro horas, una multitud de personas admiran estos pasos en horas de la noche. La Semana Santa de Ipiales, fue declarada por el Concejo Municipal como Patrimonio cultural inmaterial del Municipio, por Acuerdo n° 47 del 27 de noviembre de 2012, un acto importante que reconoce nuestras tradiciones religiosas y populares, y las cataloga en el calendario nacional.
La Fiesta de la Virgen de las Lajas
En honor a Nuestra Señora de las Lajas, "la Virgen Mestiza" como la llama la tradición, o "de la Roca", en el decreto de coronación canónica. Los orígenes de la fiesta datan desde cuando la feligresía de Ipiales y sus alrededores, celebraron junto a fray Gabriel de Villafuerte la primera misa de la aparición milagrosa, el 15 de septiembre de 1754. De entonces se acrecienta la festividad, con millares de peregrinos de Colombia, Ecuador, de otros países, y de la comarca, que acuden fervorosos a celebrarla cada 16 de septiembre. Inician con el quincenario, los fiesteros de cada día son cerca de 500, representados en comunidades de las parroquias cercanas, quienes vienen en romerías; homenajean a la Virgen con actos litúrgicos y programas culturales. Es una fiesta multitudinaria, sin igual, esplendorosa, plena de fe que asombra al más incrédulo.